Emily Dickinson
La poetisa norteamericana Emily Elisabeth Dickinson nació en Amhers Massachussets el 10 de diciembre de 1830, hija de un prestigioso abogado, Edward y de Emily Norcross. Un año antes había venido al mundo su hermano mayor Austin y en 1833 nacería su hermana Lavinia.
El ambiente familiar está dominado por el puritanismo y una gran intransigencia religiosa, pero los hermanos se llevan bien y están muy unidos, tal vez en una comprensible reacción contra el severo clima hogareño.
Entre los diez y los doce años hay traslados de domicilio importantes para Emily, muchacha muy poco amiga de cambios. En esta época su hermano Austin marcha a estudiar al Willingston Seminary, iniciándose entre ambos una copiosa correspondencia que, en el futuro, compondrá parte del epistolario de la poetisa.
A loas15 años, Emily viaja a Boston por vez primera, y más que nada para consolarse de la tristeza que en ella ha producido el fallecimiento de su amiga Sophia Holland.
A los 16 años concluye sus estudios en la Amherst Academy -posteriormente concluyó su instrucción en el seminario femenino de Mount Holyoke-, y conoce en el seno de su hogar a Benjamín Franklín Newton, pasante de su padre, en quien encuentra el propulsor de sus incipientes pasos literarios. Cuando Benjamín se va de Amherst, dan comienzo a una larga correspondencia que no ha dejado huella por desaparecida, aunque es de suponer que pudo existir algún idilio platónico entre ellos, supuesto romance que, de haberlo, tuvo una vida muy corta ya que el joven falleció en 1853.
Por aquella época Susan Gilbert, la que llegará a ser su cuñada, entra en la vida familiar convirtiéndose en la mejor amiga de Emily.
A los 24 años Emily, y su hermana Lavinia, marchan a Washington de visita con motivo de que el padre ha resultado electo Miembro del Consejo, pero de regreso, y pasando por Filadelfia se encuentra con el que ha pasado a la leyenda como el amor de su vida, el pastor presbiteriano, Charles Wadsworth, con quien también se carteará; correspondencia que lamentablemente se ha perdido.
En años sucesivos la existencia de Emily se va deslizando dentro de la vida doméstica del marco familiar en el que parece como si voluntariamente se enclaustrara a partir de haber cumplido los 30.
Su hermano contrae matrimonio y ella da principio a reunir en fascículos sus poemas.
Su relación con Wadsworth se enfría con la distancia, ya que él marcha junto con su familia a San Francisco y Emily sufre por esta causa.
Los amores de Emily Dickinson fueron siempre platónicos y epistolares. Se ha dicho de ella que era lesbiana y que estas relaciones sentimentales tan asépticas no fueron más que una tapadera, ya que la sociedad de su época no era precisamente permisiva en cuestiones de tipo sexual.
Sea lo que sea, Emily, aún añadió un par de nombres masculinos a su lista: el del crítico literario Thomas Wentworth Higginson y el de un amigo de su padre, el juez Otis P. Lord, cuando éste queda viudo.
Mientras todo lo acabado de mencionar transcurre, Emily sufre una afección en la vista que requiere tratamiento en Boston, su padre fallece en Washington y su madre enferma de parálisis después.
Una célebre escritora, Helen Hunt Jackson, lee sus poemas, la visita y le ruega, sin resultado, que se decida a editarlos. Aunque finalmente, entre 1877 y 1880, la convence para que al menos los publique de manera anónima.
Entre 1882 y 1885 mueren varias personas muy significativas en la vida de Emily, el juez Otis P. Lord, el hijo de su hermano Austin, a quien ella adoraba, y la escritora Helen Hunt Jackson.
En 1886, el 15 de mayo, es Emily Dickinson quien abandona este mundo afectada de una complicada nefritis.
En vida sólo vio impresos siete poemas, y, al fallecer se descubrieron en su dormitorio más de dos mil.
Póstumamente sus libros se publicaron en tres bloques de poemas entre los años 1890, 91 y 96.
La obra de Emily Dickinson pertenece a la escuela de la poesía metafísica inglesa del siglo XVII, siendo sus títulos más famosos El lebrel solitario, Nuevos poemas y Flechas de melodía.
Ahora se la reconoce como una gran poetisa norteamericana, pero durante toda su existencia, pasó desapercibida, y de no haber sido por su hermana Lavinia, Thomas Wentworth Higginson y una amiga de la familia, Mabel Loomis Todd, su obra se habría perdido como sucedió con gran parte de su correspondencia, aunque lo que de ella queda de estas cartas fuese publicada en una edición de tres tomos en el año 1958.
Una vida anónima, melancólica y llena de sueños, rescatada por la literatura que le ha concedido la inmortalidad.
© 2003 Estrella Cardona Gamio
